Ya sea que tengas un trabajo tradicional de 9 a 5 o establezcas tu propio horario, trabajar desde casa puede ser tanto una bendición como una maldición. No tener que ir al trabajo, tener un código de vestimenta o tener compañeros de trabajo ruidosos son grandes ventajas, pero trabajar desde casa puede hacer que sea más difícil lograr un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida y puede ser muy aislado.
Sigue estos consejos de bienestar para mantener una rutina de trabajo desde casa feliz, productiva y saludable.
Sigue una rutina que funcione para ti
Por muy tentador que sea simplemente trabajar cuando llega la inspiración, como seres humanos, prosperamos cuando tenemos una rutina. Afortunadamente, cuando estás en casa, tienes un poco más de control sobre cómo es esa rutina.
Algunos eligen igualar la rutina de la oficina que han seguido durante años tanto como sea posible. Otros prefieren variar un poco, tal vez trabajando unas horas antes de ir al gimnasio o saliendo una o dos horas por las tardes para hacer mandados o recoger a los niños de la escuela. Independientemente de cómo elijas estructurar tu rutina, se lo más consistente posible con tus horas de trabajo.
Toma descansos frecuentes
Los descansos regulares deben ser parte de cualquier rutina de trabajo. Los descansos nos permiten recargarnos, relajarnos y reenfocarnos brevemente. A veces puedes sentir que estás demasiado ocupado para alejarte incluso por unos minutos, pero la mayoría de las personas descubren que en realidad son más productivas y están menos estresadas cuando se alejan de sus escritorios periódicamente.
Así que da un paseo rápido, has algunos estiramientos, tome un refrigerio, siéntate afuera bajo el sol, al menos unas cuantas veces al día. Los descansos pueden parecer un lujo (¡y ciertamente pueden ser un lujo!), pero en realidad son una necesidad si deseas evitar el agotamiento y mantener una vida laboral saludable.
Toma tiempo libre
Las rutinas son geniales, los descansos son geniales, pero a veces necesitamos desconectarnos por completo por un tiempo y hacer algo totalmente diferente. A pesar de los beneficios obvios de tomarse un tiempo libre, casi la mitad de los estadounidenses no usan todo su tiempo libre cada año. A aquellos que no tienen beneficios de tiempo libre pagado les va aún peor.
Pero al igual que tomar descansos puede ayudarte a ser más productivo, tomarse un tiempo libre en realidad te convierte en un mejor empleado y, por supuesto, también beneficia tu vida no laboral. Incluso si la tarea de planificar unas vacaciones parece desalentadora, incluso si tienes que trabajar más de antemano, incluso si no tienes el presupuesto para hacer algo "emocionante", programa tiempo libre al menos algunas veces al año para que tu cuerpo y la mente puede obtener el descanso que necesita.
Ten cuidado de no dejar que el trabajo te persiga una vez que esté fuera del horario laboral. Trabajar mientras estás de vacaciones anula muchos de los beneficios que obtienes al tomarte un tiempo libre.
Prepara snacks saludables
Es difícil pasar el día sin bocadillos. Y cuando tienes fácil acceso a tu propio refrigerador y microondas, nunca ha sido tan fácil encontrar algo para comer.
Lo cual crea sus propios problemas. En los últimos años, muchos han experimentado lo que la gente denominó informalmente el "Covid 19", es decir, el aumento de peso después de que comenzaron a pasar más tiempo en casa. Si haces la mayor parte de tu trabajo desde casa, será tu responsabilidad abastecerte de refrigerios fáciles y saludables. Si estás estancado y necesitas nuevas ideas, prueba una de estas ideas de refrigerios bajos en calorías.
Mantente hidratado
Mantén una botella de agua contigo mientras trabajas. Si la rellenas un par de veces al día, deberías obtener suficiente agua para mantenerte hidratado.
Si comienzas a aburrirte con el agua, intenta mezclarla con un polvo de sabor sin azúcar. Evita las bebidas azucaradas tanto como sea posible.
Mantén tu espacio de trabajo limpio y cómodo
Sea cual sea el aspecto de tu espacio de trabajo, manténlo limpio y ordenado. Un escritorio limpio y ordenado significa que no perderás el tiempo todos los días tratando de encontrar cosas. Además, un espacio libre de desorden puede sentirse como un suspiro de alivio: el simple hecho de tener un espacio limpio para trabajar es un alivio del estrés en sí mismo.
Has que tu espacio de trabajo sea acogedor y cómodo también. En primer lugar, asegúrate de tener una buena silla y de que el teclado y los monitores de la computadora estén colocados adecuadamente para que no estés encorvado sobre una pantalla todo el día. Si tu espacio tiene una ventana, abre las persianas para que puedas disfrutar de la luz natural del sol. También puedes considerar agregar algunas plantas de interior, fotografías de tus seres queridos o arte que te inspire. Una de las mejores cosas de trabajar desde casa es que no tienes que sentarte en el mismo entorno aburrido todos los días. Puedes cambiar tu entorno cuando lo desees, ¡aprovecha este beneficio!
Conecta con otros
Trabajar desde casa probablemente signifique que no interactuarás tanto con tus colegas. El trabajo es uno de los mejores escenarios para que los adultos formen y mantengan amistades, pero si haces tu trabajo en casa, necesitarás encontrar otras formas de mantener conexiones sociales activas en tu vida.
Esto va más allá de simplemente activar el video para las reuniones de Zoom. Reúnete con tus colegas cara a cara de vez en cuando. Sal a almorzar con las personas que viven cerca de ti. Conoce a los padres de los amigos de tus hijos. Únete a una liga o club deportivo en tu área. Trabajar desde casa te brinda la oportunidad de entablar relaciones con personas fuera de tu campo de trabajo, lo que puede ser una gran ayuda para tu salud social.
Desconéctate después de horas
Cuando tu hogar es también tu lugar de trabajo, puede ser difícil separar los dos. Esto significa que es aún más importante que nunca desconectarse del trabajo cuando termine la jornada laboral (cualquiera que sea la hora que sea para ti). Resiste la tentación de revisar el correo electrónico después de la cena o empezar un proyecto para el día siguiente después de que los niños estén en la cama. Concéntrate en tu familia, pasatiempos y otras obligaciones cuando no estés “en el trabajo”. Si te desconectas correctamente, estarás aún más renovado al día siguiente cuando sea el momento de volver al modo de trabajo.
Trabajar desde casa es una comodidad maravillosa para aquellos cuyos trabajos lo permiten. Sin embargo, las comodidades del hogar significan que deberás establecer diferentes pautas para que funcione a largo plazo. Al seguir estos consejos de bienestar, podrás aprovechar al máximo el trabajo desde casa sin permitir que invada el tiempo de tu familia, tu salud y tu vida social.
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